La cirugía de revisión de reemplazo de rodilla es un procedimiento que algunas personas pueden necesitar si tienen una articulación dañada o enferma. Con el reemplazo total de rodilla (RTR), o artroplastia de rodilla, la mayoría de las personas obtienen buenos resultados y disfrutan de muchos años de función con su prótesis articular. Pero ¿qué sucede cuando una prótesis de rodilla se desgasta? A veces, estas articulaciones fallan. En ese caso, se necesita un reemplazo total de rodilla de revisión, un procedimiento más complejo.
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Es posible que necesite una cirugía de revisión de reemplazo total de rodilla si le han hecho un reemplazo de rodilla en el pasado y tiene:
En la cirugía de reemplazo total de rodilla, el doctor reemplaza la articulación de la rodilla enferma o dañada con una prótesis. En la cirugía de revisión de reemplazo de rodilla, es necesario reemplazar algunos o todos los componentes de la prótesis. El desgaste puede dañar el hueso y el tejido circundante cerca del implante original, lo que requiere implantes especializados durante la cirugía de revisión.
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Es posible que necesite una cirugía de revisión de reemplazo total de rodilla si le han hecho un reemplazo de rodilla en el pasado y tiene:
Unas semanas antes de la cirugía, se le realizará un examen físico para confirmar que no tiene ninguna afección que pueda afectar el éxito de la cirugía o la recuperación. Si padece alguna afección crónica, como una cardiopatía, también podría necesitar consultar con estos especialistas.
Debido a que la cirugía de revisión es más compleja que el procedimiento original, es posible que necesite más tiempo de recuperación y más ayuda durante la misma. Dependiendo de su condición, podría necesitar permanecer en una residencia de ancianos o un centro de rehabilitación después de la cirugía. Además, le conviene que alguien le ayude en casa con la cocina, las compras, el baño y las tareas del hogar durante su recuperación del reemplazo de revisión de rodilla.
Es probable que su doctor le recomiende pruebas de imagen para evaluar el estado de su rodilla. Estas podrían incluir radiografías, gammagrafías óseas con medicina nuclear, resonancias magnéticas o tomografías computarizadas. Los análisis de sangre pueden identificar infecciones en la rodilla. Y si su doctor sospecha una infección, podría extraer líquido de la articulación de la rodilla para analizarlo.
Su cirujano evaluará estas pruebas para determinar qué componentes probablemente deban reemplazarse. Sin embargo, la decisión final sobre el reemplazo de todos los componentes se toma durante la cirugía. Obtenga más información sobre los servicios de imagenología y diagnóstico disponibles en Banner Health.
La cirugía de revisión de rodilla es un procedimiento más complejo que el reemplazo primario de rodilla. Suele ser más largo y requiere herramientas especializadas y experiencia quirúrgica. Recibirá anestesia general para el procedimiento.
El cirujano realizará una incisión sobre la rodilla y desplazará suavemente la rótula y los tendones hacia un lado para acceder a la articulación. Esta incisión suele ser más larga que la utilizada en la cirugía original de rodilla para dejar suficiente espacio para retirar con seguridad el implante de rodilla antiguo. El cirujano evaluará el estado de los componentes y buscará signos de infección, desgaste y daño tisular.
El exceso de tejido cicatricial y el tejido blando dañado son problemas comunes en la revisión de reemplazo total de rodilla. Estos problemas pueden limitar el rango de movimiento y causar rigidez en la articulación. Es posible que el cirujano deba extirpar o liberar con cuidado el tejido cicatricial y ajustar o reparar el tejido blando circundante para mejorar la estabilidad articular y ayudar a restaurar la movilidad. Estos pasos son fundamentales para garantizar un resultado exitoso de la cirugía de revisión de rodilla.
Una vez retirado el implante original y evaluada la articulación de la rodilla, el cirujano reconstruirá la zona según sea necesario. Si ha perdido hueso debido a aflojamiento, fractura o infección, es posible que utilice un injerto óseo o espaciadores metálicos para rellenar los huecos y proporcionar una base sólida. Posteriormente, se colocarán y fijarán los nuevos implantes de rodilla, incluyendo los componentes femoral, tibial y posiblemente rotuliano.
Para finalizar el procedimiento quirúrgico, el cirujano puede colocar un drenaje para extraer líquido y sangre del área y luego cerrar cuidadosamente la incisión.
Toda cirugía mayor conlleva riesgos. Estos riesgos suelen ser los mismos que comentó con su cirujano durante su primera cirugía. Sin embargo, la complejidad del procedimiento puede aumentar el riesgo potencial. Las posibles complicaciones de la cirugía de revisión de rodilla incluyen:
¿Tiene preguntas sobre sus riesgos? Nuestro equipo está aquí para atender sus inquietudes y guiarle en el proceso.
Su doctor le dará instrucciones detalladas para el cuidado de su nueva articulación de rodilla una vez que esté en casa. Seguir estas instrucciones al pie de la letra es fundamental para prevenir complicaciones y retomar su rutina diaria.
Al principio, podría necesitar un andador o muletas para mejorar el equilibrio y la movilidad. Su equipo médico le mostrará cómo vendar y cuidar la herida quirúrgica. Evite remojar la zona hasta que esté completamente cicatrizada. Los puntos o grapas suelen retirarse aproximadamente dos semanas después de la cirugía.
Banner Health ofrece programas ambulatorios de fisioterapia y rehabilitación para ayudar a recuperar la amplitud de movimiento y fortalecer la zona. Continuará la terapia en casa y con un fisioterapeuta colegiado, probablemente durante un máximo de tres meses. Estos ejercicios son importantes para aliviar el dolor, reducir la rigidez y prevenir la formación excesiva de tejido cicatricial.
Es posible que le pidan que limite el peso que apoya sobre la rodilla o la flexión hasta que la recuperación progrese. Con el tiempo, el objetivo es estirar completamente la pierna y flexionarla al menos 90 grados.
La recuperación tras una artroplastia total de rodilla de revisión puede ser más larga que la recuperación tras una artroplastia primaria. La mayoría de las personas pueden retomar sus actividades habituales y trabajar en un plazo de tres a seis meses. La recuperación completa, incluyendo la actividad física intensa y el ejercicio, puede tardar hasta 12 meses.
Aunque algunas personas pueden seguir experimentando una leve rigidez o malestar, la mayoría ve una mejora significativa en la estabilidad de las articulaciones y la función diaria.
Aunque algunas personas aún pueden presentar dolor, rigidez y disminución de la función incluso después de recuperarse de la cirugía, la mayoría obtiene buenos resultados tras la revisión del reemplazo articular. Presentan menos dolor, mayor estabilidad articular y una mejor función.
El reemplazo primario de rodilla es la primera cirugía para reemplazar una articulación dañada. Un reemplazo total de rodilla de revisión se realiza cuando el primer implante se desgasta, se afloja o falla. La cirugía de revisión es un procedimiento complejo que requiere técnicas avanzadas y puede implicar injertos óseos o implantes de rodilla especializados.
Es posible que necesite una cirugía de revisión si su prótesis de rodilla original ha fallado debido al desgaste, infección, aflojamiento, fractura o inestabilidad. Los síntomas pueden incluir dolor persistente, inflamación o limitación del movimiento. Algunas personas también requieren cirugía de revisión debido a problemas con los tejidos blandos o exceso de tejido cicatricial.
La mayoría de las personas se recuperan lo suficiente como para retomar sus actividades diarias habituales en un plazo de 3 a 6 meses, pero la recuperación completa, incluyendo el ejercicio y las tareas extenuantes, puede tardar hasta 12 meses. Necesitará fisioterapia para mejorar la amplitud de movimiento y la fuerza.
En ocasiones. Si se ha perdido hueso debido a una infección o al aflojamiento del implante, el cirujano puede usar un injerto óseo o un refuerzo metálico para reconstruir la articulación y ajustar correctamente el nuevo implante de rodilla.
La recuperación puede ser más difícil después de una revisión debido a que el procedimiento quirúrgico suele ser más complejo. Sin embargo, con un buen tratamiento del dolor y fisioterapia, la mayoría de las personas logran aliviar el dolor y recuperar la función con el tiempo.
Como con cualquier procedimiento quirúrgico, existen riesgos. Estos incluyen infección, coágulos de sangre , mala cicatrización de heridas, reducción de la amplitud de movimiento o daño a nervios o vasos sangre . Su equipo de atención médica en Banner Health lo supervisará de cerca para reducir estos riesgos.
Sí, pero depende de su salud general, la calidad ósea y el estado de la articulación de la rodilla. Si bien muchas personas se recuperan bien tras una sola revisión de reemplazo total de rodilla, algunas podrían necesitar otra cirugía si surgen complicaciones o el implante vuelve a fallar.
Sin embargo, cada cirugía adicional puede ser más compleja y podría implicar más injertos óseos o reconstrucción de tejidos blandos. Su cirujano ortopedista de Banner Health le ayudará a comprender sus opciones y riesgos.
Si aún sufre de dolor o problemas de una cirugía de reemplazo de rodilla anterior, no tiene que lidiar con ello solo. Los expertos en ortopedia de Banner Health se especializan en la revisión del reemplazo total de rodilla, un procedimiento complejo que requiere capacitación, experiencia y tecnología avanzadas.
Trabajaremos con usted para crear un plan personalizado que le ayude a restaurar su movimiento, reducir su dolor y permitirle volver a hacer lo que ama.
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